Libérate de los mocos cuando corres

El otoño, el cambio de temperatura y el viento fresquete dándote en plena cara…. resfriado seguro. ¿Hay algo malo en resfriarse? ¡Claro que no! Es más, es la excusa perfecta para no ir al colegio o al trabajo.
¿Eres deportista? Hay amigo… entonces sí tienes un problema. Y es que el resfriado trae consigo ciento de miles de inquilinos que pueden hacer que tus sesiones de running sean un auténtico infierno. ¡Los malditos mocos!

Antes de entrar en detalles sobre cómo liberarte de los mocos cuando corres démosles un minuto de respeto y entendamos qué son y para qué sirven esos horripilantes bichos. Los mocos son una respuesta orgánica o biológica que sirve, ni más ni menos, que para luchar contra los activos negativos del organismo. ¡Sí, aunque intentemos destruirlos para siempre ellos solo quieren protegernos!

Bueno, después de la clase médica vayamos a donde queremos estar. ¿Qué hacemos para librarnos de esos mocos? Un inexperto, dándoselas de sabio, te diría: jopeta, pues respira por la boca. ¡Ni caso! ¡Ni se te ocurra! ¡Ni lo intentes! Lo único que conseguirás con ello es hacer que tu garganta sufra más de lo normal convirtiéndola en un coladero para todo tipo de bacterias.

¿Y entonces que narices hacemos? Pues lo que nos han enseñado toda la vida, sonarnos. Eso sí, como recomendación personal te diría que no intentes hacerlo en casa, que no te pongas ropa cara cuando vayas a hacerlo o que dejes un radio de seguridad… por si acaso.

¿Has visto que fácil? Coge un pañuelo, métetelo en el bolsillo y cuando tengas mocos colgando suénate. Con la práctica lo conseguirás incluso sin detener la marcha. Después te guardas de nuevo el pañuelo y ala, a seguir.